Las personas con Diabetes Mellitus de tipo I o II pueden sufrir una serie de complicaciones derivadas de la enfermedad con el trascurso del tiempo, sobre todo en casos que no tengan controlada la glucemia, que lleven una dieta inadecuada y cuya la actividad física sea nula.

Unas de las consecuencias a largo plazo más frecuentes son la neuropatía y la vasculopatía diabética, las cuales tendrán sus repercusiones más inmediatas en las extremidades, sobre todo a nivel de los pies.

La neuropatía diabética es una complicación frecuente de la DM en la que existe lesión de los nervios por el elevado nivel de glucosa en sangre, entre otros factores, afectando principalmente a las fibras nerviosas de las piernas y de los pies. Dependiendo de los nervios afectos los síntomas van desde el dolor, el entumecimiento y las parestesias en las extremidades hasta problemas de los vasos sanguíneos y el corazón al juntarse con el conjunto de patologías que afectan a los vasos sanguíneos en la vasculopatía diabética.

Por todo lo anterior es recomendable prevenir lesiones en los pies realizando revisiones periódicas de la sensibilidad y circulación sanguínea.

¿Qué papel juega el podólogo en el pie diabético?

El podólogo juega un papel crucial tanto en la prevención de lesiones en los pies del diabético como en la cura de úlceras derivadas de las complicaciones neuropáticas.

・1. Revisiones de la sensibilidad y el pulso podales

・2. Cura de úlceras diabéticas

・3. Elaboración de plantillas de descarga

・4. Consejos de calzado